Casa Chao

Casa Chao

Ficha técnica

Autores:

Creus y Carrasco Arquitectos 

(Juan Creus y Covadonga Carrasco)

Colaboradores:

Bárbara Mezquita y Celsa Pesquera

Cálculo estructura de madera :

Estructura: Félix Suárez Riestra

Instalaciones: Isabel Francos Anllo

Promotor:

José Manuel Chao

Constructora:

J.M. Rodríguez Garrido

Situación:

Corcubión

Año:

2013

Superficie:

221,78 m2

Fotografía:

Héctor Santos-Díez

Descripción

Memoria

Volver a construir una pequeña vivienda de poco más de 3 metros de ancho y 16 de fondo en el extremo de una manzana. La casa anterior: bar y vivienda con medianera ciega, bien orientada, situada en el casco histórico de esta villa de la Costa da Morte. 

Resolver con claridad la escena urbana, aportando una visión renovada del modo de construir, sin olvidar la propia identidad, mediante referencias a la historia y cultura del lugar.

Edificar en madera, recordando la construcción marinera, empleando la tabla pintada de blanco, color insistente en galerías y entrepaños de las casas de la villa. Hacer pétrea parte de la planta baja, en cotinuidad con las fachadas de la calle tradicional. Recoger el espíritu de la arquitectura popular sin renunciar a una expresión propia.

Tener aproximadamente 120 m2 útiles repartidos entre b+2+bc. La planta baja como entrada y garaje para dos coches. La primera, zona de día: estar y cocina. La segunda, habitación con estudio y baño. El bajo cubierta, habitación con baño.

Hacer un planteamiento sencillo basado en la dimensión longitudinal de un espacio diáfano y en la centralidad de los accesos. La escalera, arrimada a la medianería, deja estancias a cada lado, mientras la fachada, en su parte central, le hace sitio como destaque en plantas altas o las aproxima como entrada a cubierto en el acceso principal. Las alturas dobles y las estrechas ventanas-balcón, relacionan las plantas entre sí y el espacio exterior, sin llegar a mostrarlo todo.

Reinventar, con su apariencia urbana, un nuevo espacio vivo, hasta ahora en ruina y sin resolver.

Retos constructivos de la obra

"En la solución de la fachada de la Casa Chao es clave la participación e implicación de los carpinteros", señalan los arquitectos.

Una fachada tan expuesta como ésta al sol, pero también al agua y al viento, requirió de un estudio previo del tipo de madera, espesor y resolución de la junta. El tablero de iroco, cepillado a 3,5 cm de grosor y la "galleta" intermedia que une uno con el otro, permitiendo su movimiento, forman una piel exterior solidaria y resistente. 

El rastrelado, también de iroco, clavado sobre el muro de ladrillo macizo, con rebajes y la cara interior ranurada del tablero, permiten la circulación del aire y su ventilación de arriba a abajo. 

Las ventanas de cedro, desplazadas unas de otras, obligan además al ajuste dimensional del despiece vertical, resuelto mediante la utilización de tres anchos diferentes de tablero, estudiados uno a uno para su encaje total evitando recortes.

La hoja de las ventanas, situadas en el interior de una pieza-cajón que atraviesa todo el espesor de la fachada, introduce la madera en el interior, donde vuelven a trabajar los carpinteros haciendo puertas, armarios, estanterías y escaleras de un interior muy estrecho que contrasta con el hormigón visto.

En el centro de la cocina, junto al panel luminoso recuperado del antiguo bar que había en la planta baja, una larguísima y estrecha mesa hecha en pendiente melis. "Una casa cuyo vestíbulo, cada vez que volvemos, nos recibe con ese agradable olor de una envoltura de cedro", afirman Creus y Carrasco.

INFORMACIÓN GRÁFICA

PREMIOS Y RECONOCIMIENTOS

Año 2014:

Mención especial en los Premios FAD

Año 2015:

Nominación al Premio Mies van diere Rohe

Reconocimiento en el Día Mundial de la Construcción Sostenible

Año 2016:

Premio de la Bienal Española de Arquitectura y Urbanismo-BEAU

Premio Gallego de Arquitectura

Selección Bienal Iberoamericana de Arquitectura y Urbanismo-BIAU

Comentarios Jurado a los reconocimientos obtenidos:

Se destaca la integración de la nueva edificación en un núcleo tradicional, además del diseño de interiores, la integración y diálogo que genera entre lo interior y el exterior y el uso acomodado de materiales y elementos constructivos actuales para dialogar con las edificaciones de su entorno. Entre las características que se replantean desde un lenguaje arquitectónico actual, se cuenta una galería reinterpreatada por los arquitectos, así como un zócalo de piedra para darle continuidad con el inmueble contiguo y una fachada de madera.